Técnica del Masaje Californiano

El Masaje Californiano trabaja absolutamente todo el cuerpo de una manera integral, de cabeza a pies, recurriendo a una amplia variedad de técnicas de contacto profundo y movilización, acompañadas por los característicos movimientos largos y fluidos que integran los diferentes gestos, envolviendo dulcemente todo el cuerpo y facilitando el flujo y el movimiento natural de la energía interior.

El masaje californiano no es sólo un masaje o una técnica, sino una forma de trabajo corporal completa. Se realiza principalmente con las manos, antebrazos y codos, aprovechando el peso del propio cuerpo del masajista y utilizando aceites que facilitan la fluidez y la calidad del contacto con la piel a través de la suavidad y sensibilidad de las manos.

Aunque uno de los objetivos principales de este tipo de masaje y sus movimientos integradores largos y delicados es ayudar a relajarse a la persona y reducir el estrés, también incorpora gestos y elementos de otras técnicas, tales como estiramientos suaves, movilizaciones pasivas de articulaciones y trabajo más intenso y definido sobre el tejido muscular profundo, lo que permite que cada masaje sea único y personalizado, y que, además de experimentar una profunda relajación, se experimente alivio en molestias crónicas, ayuda a la liberación de bloqueos y contracturas musculares, ampliación del rango de movimiento articular y una reorganización postural, impactando positivamente en los sistemas circulatorio y nervioso, y por consiguiente en el estado de ánimo, logrando un incremento de energía y una conciencia más elevada sobre el propio cuerpo y sobre uno mismo.

Es un masaje dado desde, con y para el corazón, y se recibe en todo el cuerpo,  prestando  atención a aquellas zonas que necesitan mayor dedicación, evidenciándose a través del contacto y la percepción del masajista.